Muy cerca de lugares que el visitante raramente puede evitar de frecuentar como las múltiples posibilidades de transporte público del Cais do Sodré, del mercado (o ex mercado) del mismo nombre, y en el corazón de la zona más conocida de vida nocturna de Lisboa, se sitúa esta bonita plaza que puede pasar fácilmente desapercibida y que merece una atención. En los extremos de la zona de la Baixa reconstruída después del terremoto de 1755, hasta hace poco era una área relativamente marginalizada de la ciudad, alguna actividad de prostitución y comercios de varios tipos, con el auge turístico de estos últimos años está rodeada de locales de hostelería de todo tipo y de tiendas igualmente variadas, y en mudanza constante, se puede decir que es una de las zonas más de moda si no la que más en la ciudad de Lisboa.
El chafariz o fuente en forma de obelisco data de 1849, posteriormente la plaza se fue ornamentando con kioskos y terrazas que actualmente están más escasas debido a obras en algunos de los edificios colindantes, el suplicio de la Lisboa contemporánea.
La iglesia de São Paulo, que da nombre a la plaza ("largo" en portugués, como sucede del mismo modo en italiano, es más "ancho" que no largo en la acepción castellana) fue construída en 1768 en sustitución de la destruída por el terremoto que databa del sXV.
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